Daniela Andreina Aguilar Ceiba, es una alumna de la Escuela de Arte ESDIP, actualmente cursa 3º de Creación Artística, Gráfica y Digital con especialización en animación, realizando sus prácticas en la productora de animación ESDIP Animation Studio. Tuvimos la oportunidad de conocer más sobre su trayectoria y pasiones en el mundo del arte.
“Yo nací en Venezuela de donde tuve que emigrar a Perú y finalmente a España. La experiencia de ser emigrante y crecer en diferentes países y culturas ha sido de las cosas que más me han marcado. Este año tuve la oportunidad de desarrollar junto a compañeros increíbles una historia sobre uno de los muchos sentimientos que se afrontan como emigrante ( y que muchas más personas pueden compartir), el no sentirte “Ni de aquí, Ni de allí” como se titula el corto. La experiencia en sí, a pesar de ser muy dura en cantidad de trabajo, se me hizo muy especial al poder ver como la historia fue tomando vida con todo el esfuerzo y corazón que le pusimos a la historia. Además, a partir de ahí me conmovió como familiares y amigos me dijeron que pudimos hablar de un sentimiento que siempre han tenido. Con esta experiencia, me llena de emoción y esperanza las historias que se pueden llegar a dar voz a través de un medio que me apasiona tanto y tengo mucha ganas de dar todo mi esfuerzo para próximamente sacar el corto adelante. “
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Cuando le preguntamos qué había hecho antes de embarcarse en el mundo de la animación, Daniela compartió que, desde temprana edad, le encantaba dibujar. Sin embargo, fue en Perú donde tuvo sus primeras clases de arte. Aunque nunca se le planteó la opción de convertirse en ilustradora o animadora, siempre supo que quería seguir una carrera que involucrara el dibujo. Inicialmente, pensó en ser arquitecta, pero descubrió que el dibujo técnico no era su fuerte. Finalmente, optó por un bachillerato de humanidades, siguiendo sus intereses en temas sociales. Sin embargo, al momento de tomar la decisión final sobre su carrera, ya estaba más informada sobre las opciones disponibles y decidió priorizar lo que realmente disfrutaría y la haría feliz. Así fue como decidió estudiar animación para cine y series.
Fuera de la escuela, Daniela dedica la mayor parte de su tiempo a sus estudios. Sin embargo, ha tenido la oportunidad de realizar algunos encargos de diseño, como la creación de un logo y camisetas para su grupo de capoeira. Siempre que puede, disfruta dibujando pequeñas cosas para sí misma y para sus seres queridos.
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Inicialmente, Daniela ingresó a ESDIP con la intención de enfocarse en la animación. Sin embargo, a medida que avanzaba en sus estudios, se dio cuenta de que aunque disfrutaba de la animación, le costaba desarrollar destreza en esa área. Al mismo tiempo, descubrió que su verdadera pasión radica en la pintura y en contar historias a través de la ilustración narrativa en diversos formatos, como ilustraciones individuales, cómics, concept art o desarrollo visual.
Actualmente, su objetivo es trabajar en el departamento de desarrollo visual de una producción animada. Esta área le brinda la oportunidad de combinar su amor por el arte con la creación de narrativas visuales.
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Cuando se le preguntó por qué eligió ESDIP, Daniela mencionó la atractiva oferta educativa de la escuela. Aunque inicialmente se sentía atraída por la animación, no estaba segura de en qué área específica de las artes audiovisuales quería enfocarse. Sin embargo, gracias al curso de Creación Artística, Gráfica y Digital, tuvo la oportunidad de explorar y probar diferentes disciplinas, desde la animación hasta la ilustración y el modelado 3D. A través de esta experiencia, Daniela descubrió lo que más disfrutaba y se le daba mejor, e incluso se sorprendió al encontrar intereses que ni siquiera esperaba tener.
Daniela destaca el invaluable apoyo que ha recibido de los profesores y compañeros de ESDIP. “He apreciado mucho los profesores (como Jorge Sefy, Andrew Velas, Elena Manzano, Eva Martin, Jimena Lagunilla y se me quedan más por supuesto) y compañeros que he conocido son una gran inspiración y una ayuda constante a seguir mejorando y han hecho de estos tres años una experiencia maravillosa.”
Cuando se le preguntó a Daniela por qué eligió la animación como su campo de estudio, admitió que resulta difícil de explicar en palabras, pero destacó la magia de dar vida a los dibujos. La combinación del movimiento, la música, el sonido y los recursos cinematográficos ofrece un potencial increíble y conmovedor para contar historias y transmitir emociones. Para Daniela, la animación brinda una libertad de expresión única y una manera poderosa de comunicar mensajes a través de imágenes en movimiento.
En cuanto a la preferencia entre la animación 2D y 3D, Daniela confesó tener un cariño especial por la estética 2D. Sin embargo, considera que no hay una opción superior a la otra, ya que ambas permiten generar estilos visuales increíbles. Lo más importante, según Daniela, es que la estética elegida potencie la historia que se quiere contar. En última instancia, se trata de utilizar los recursos disponibles para crear una experiencia narrativa impactante.
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